La ropa y los accesorios de los motoristas son mucho más que una cuestión relacionada con las tendencias de moda. Este tipo de equipamiento está diseñado para reducir en un alto porcentaje las lesiones, fracturas o quemaduras en caso de sufrir un siniestro. La tecnología y los nuevos materiales abren todo un campo de posibilidades para incrementar la seguridad sobre dos ruedas.
CASCO: Actualmente el casco es el único elemento de protección obligatorio que se debe llevar al circular en moto. Desde la DGT recuerdan que 3 de cada 4 motoristas fallecen tras sufrir heridas en la cabeza por un choque o una caída.
Existen tres tipos de cascos: los modulares (que permiten abrirse para tener aireación en determinados momentos); los tipo jet (que no protegen la cara, por lo que hay mayor peligro de sufrir más heridas); y, por último, los integrales, que representan la opción más recomendable, ya que cubren la cabeza por completo. Es importante también asegurarse de que el casco tenga un buen sistema de cierre: hebilla automática, hebilla micrométrica y hebilla doble-D son los más comunes y este último sistema es el más recomendable.
Es necesario que el casco esté homologado, lo que garantiza que en caso de impacto se comportará correctamente. Además, es muy importante que sea de nuestra talla y esté correctamente abrochado. Según el estudio de fundación MAPFRE “Hoja de ruta para la mejora de la seguridad vial de los usuarios de motocicletas y ciclomotores” en el 6% de los siniestros mortales en motocicleta el casco salió despedido y en el 29% en el caso de ciclomotores.
GUANTES: La Dirección General de Tráfico propuso el uso obligatorio de guantes para circular en moto, pero finalmente la medida no se ha incluido en la recientemente aprobada nueva Ley de Seguridad Vial. Esta prenda debe proteger las manos y las muñecas de los motoristas sin dificultar el manejo del vehículo. Cuando se produce una caída, el conductor, de forma instintiva, tratará de amortiguarla anteponiendo las manos por lo que los guantes-además de proteger del sol, del viento, del frío y de los impactos de arenilla e insectos, también evitan cortes, arañazos y quemaduras por rozamiento. La DGT recomienda usar guantes de verano en los meses de calor (favorecen la circulación del aire) y de invierno en los meses más fríos (más pesados, con relleno o aislantes).
BOTAS: Es cierto que las zapatillas deportivas son muy cómodas y rápidas de poner, pero la más mínima caída con este tipo de calzado puede provocar lesiones muy graves. Las botas son la mejor opción para proteger el pie, los dedos, tobillo y la parte inferior de la tibia. Es importante que sean de un material impermeable. Además, nuestra seguridad mejorará si incluimos protecciones en la puntera y talón.
PRENDAS DE PROTECCIÓN PARA EL CUERPO: Una chaqueta o cazadora diseñada específicamente para la moto es capaz de aguantar la abrasión en caso de caída y de amortiguar los golpes. Además, puede contar con protección reforzada en hombros, codos, espalda y pecho. En cuanto a los pantalones, cuya misión es también proteger de la abrasión y de los golpes, pueden ser de distintos materiales como cuero, cordura, kevlar o superfabric, y tener zonas más almohadilladas en el coxis, caderas o en las rodillas. Siempre es fundamental llevar la ropa de la talla adecuada. De lo contrario, las protecciones podrían moverse y no cumplir su misión.
AIRBAG: Las prendas con airbag merecen un capítulo aparte. Es cierto que su precio es todavía elevado, pero pueden hacer que una caída aparatosa no conlleve ningún tipo de lesión para el motorista. Cuando hablamos de airbags en las motos realmente estamos hablando de chaquetas o chalecos que llevan el airbag incorporado. Existen dos tipos de chalecos o chaquetas con este tipo de protección: aquellas en las que la bolsa de aire se dispara mecánicamente a través de un cable unido a la motocicletas y aquellas en las que el airbag se activa electrónicamente, gracias a acelerómetros, GPS e inclinómetros. Estas prendas han de proteger la espalda, el cuello y el toraxy han de mantener alineado el eje cabeza, cuello y tronco con el fin de evitar un latigazo cervical.
En cuanto a los pantalones, los motoristas podrán contar en breve con los primeros vaqueros con airbags que, por cierto, también podrán utilizar los ciclistas. De momento, son prototipos, pero las dos startups responsables de su diseño -una empresa francesa y otra sueca-, afirman que en breve llegarán al mercado. En los dos casos, los airbags van enganchados con una correa a la motocicleta o, en su caso, a la bicicleta. En caso de que el conductor se caiga o salga propulsado, la correa activará inmediatamente el airbag que se infla en 200 milisegundos mediante un cartucho de aire comprimido. La tela que se ha utilizado para confeccionar estos vaqueros utiliza una tecnología ya probada en investigación espacial que soporta una fricción catorce veces mayor que el acero a pesar de ser ocho veces más ligero.
Recuerda que en todos los casos el equipamiento ha de estar homologado. Y te recomendamos que en esta cuestión no escatimes recursos. Estarás invirtiendo en tu seguridad y protección: la ausencia de carrocería a bordo de una moto hace que, junto a los peatones y los ciclistas, los motoristas seáis los miembros más vulnerables de la circulación.