La temperatura de los neumáticos de moto (1)

Morrillu

20 de agosto de 2010

El otro día me comentaba un gran amigo mío que tenía problemas de agarre en los neumáticos de su moto. Estaban ya prácticamente para cambiar y desde hacía varios dias notaba que la moto le deslizaba más de lo normal. Había comprobado presiones (es casi tan maniático como yo) y todo estaba correcto por lo que me preguntaba si el modelo de neumático que llevaba sufría un bajón acusado al final de su vida útil.

Me quedé un momento pensando y le pregunté cuándo y dónde tenía estas sensaciones, a lo que me respondió que últimamente por la tarde de la que volvía para casa después de trabajar. Le miré con cara de susto y no tuve más remedio que darle una colleja amistosa. Mi amigo me acababa de revelar que las ruedas le deslizaban cuando estaban completamente frías y en el asfalto de ciudad, que no destaca precisamente por su gran agarre. ¡Normal!

Si intentásemos hacer una comparación entre un coche y una moto, el vehículo de cuatro ruedas es dos veces «más» en todo que la motocicleta. Lo bueno es que es más ágil, más rápida y más pequeña pero a la vez más inestable, más crítica y más física y esto se nota especialmente en los neumáticos. La temperatura influye muchísimo, algo lógico si tenemos en cuenta que la mayoría de las motos disponen de más potencía que los automóviles pero además esta se envía a una sola rueda, por lo que el neumático tiene que ser capaz de transmitirla al suelo de una forma mucho más efectiva.

Por si esto no fuera poco está el factor derivado de la inclinación, que tiende a que la moto se nos escape de debajo de las posaderas si hacemos una aceleración demasiado fuerte. Por todo ello, la moto en sus primeros kilómetros, requiere una conducción mucho más precavida que con un coche. Y si encima, la moto es nueva o hemos colocado un neumático de estreno, la parafina que utilizan para protegerlos resbala muchísimo, y nos podemos ir al suelo con facilidad, como podemos ver en este vídeo:

¿Qué debemos hacer entonces? Lo primero, cambiar el chip cuando nos subamos a la moto y acordarnos siempre que el motor y los neumáticos deben coger una temperatura óptima de funcionamiento. Incluso nosotros mismos debemos tomarnos unos minutos para acoplarnos cómodamente a la moto. Su conducción es muy física y requiere que usemos todo nuestro cuerpo y como tal, no siempre nos encontramos igual de bien. A veces, estamos entumecidos, o despistados, y esto es peligrosísimo. Si además como hemos dicho, las ruedas son nuevas, hay que circular con pies de plomo.

Además, es muy importante que usemos un neumático adaptado a las características de nuestra moto. Existe la creencia que una rueda, cuanto más blanda agarra mejor y esto es completamente falso. Cada tipo de goma y compuesto tiene unas características y propiedades, por lo que no podemos montar una goma de MotoGP en una Harley y viceversa, pero esto lo veremos el próximo día. Ahora, ¡a disfrutar del fin de semana con cabeza!

Foto | Mihai Bojin