Alguien nos golpea con su coche mientras estamos conduciendo y, lejos de parar para interesarse por nuestro estado y resolver la situación a través de un parte amistoso, se da a la fuga. Esta situación es mucho más habitual de lo que podemos pensar y los principales motivos por los que la otra persona decide no permanecer en el lugar del incidente suelen ser o bien porque no tiene el seguro del vehículo en vigor o porque circula bajo los efectos del alcohol u otras drogas.
Si ya es bastante estresante que nos den un golpe, el hecho de que la persona responsable se fugue puede añadir la suficiente tensión a la situación como para bloquearnos. Por ello, es importante saber cómo actuar:
Cabeza fría
Lo más importante es mantener la cabeza fría. Más allá de la rabia y el disgusto, necesitamos tener calma y tratar, en la medida de lo posible, de retener en la memoria o incluso apuntar todos los detalles del coche fugado: matrícula, modelo, color…Si además podemos aportar algún detalle descriptivo del conductor, mucho mejor. También debemos mirar alrededor para comprobar si alguien ha podido observar lo que ha pasado para ayudarnos con cualquier detalle que se nos haya podido escapar. Los testigos serán muy útiles, igualmente, de cara a la compañía aseguradora y los agentes de la ley, ya que podrán obtener de ellos una declaración firme.
Nadie ha visto nada
Pero ¿qué ocurre si todo ha sucedido tan rápido que no tenemos ningún dato del conductor? En ese caso, debes permanecer en el sitio del percance y llamar al cuerpo de seguridad que corresponda para que sean ellos los encargados de analizar los fragmentos y marcas que pueda haber dejado el otro vehículo. No toques ni muevas nada hasta que lleguen al lugar del siniestro. Abrirán primero un parte de accidentes y luego una investigación para intentar de localizar al conductor fugado, de ahí la importancia de no tocar ni mover nada. Cuando la policía o la Guardia Civil acuda al lugar de los hechos y les hayas comentado lo ocurrido, contacta con tu aseguradora y exponle la situación, consulta las condiciones de tu póliza y solicita asistencia legal.
En última instancia, tengas lesiones o no, acude a un servicio de urgencias o a un centro sanitario en un plazo máximo de 72 horas desde que tuvo lugar el siniestro, ya que si posteriormente surge cualquier problema de salud, será muy difícil demostrar que las lesiones han sido provocadas a consecuencia del siniestro.
¿Quién paga los daños?
Si no se ha conseguido identificar al infractor y la policía no ha sido capaz de localizarlo, el organismo al que hay que dirigirse es el Consorcio de Compensación de Seguros (CCS). Su función es completar los seguros privados y compensar a los clientes de la misma forma en que lo haría nuestra compañía aseguradora. Eso sí, el CCS se hace cargo de los daños a las personas y solo se hace cargo de una indemnización por daños del coche y otros bienes en casos muy graves, como pueden ser muerte o incapacidad permanente o temporal, que sume más de siete días de hospitalización. En estos casos de gravedad el CCS se encarga de los daños del coche, pero con una franquicia de 500 euros.
Al final, el infractor aparece…
Si has iniciado todos los trámites de tu reclamación y resulta que el conductor fugado aparece (aunque ya hayamos presentado la documentación) puedes demandarle. De haber daños materiales, se puede optar por la vía civil. Esto se traduce en que el importe de los daños del vehículo, de la calzada y de cualquier otro cargo para el afectado, serán abonados por la persona infractora.
En la situación de haber daños personales, se podrá ir bien por la vía civil o la penal (alcoholemia, drogas, conducción temeraria, etc.). Para interponer la denuncia hay un plazo de seis meses desde el día del siniestro. Valorar la compensación corresponde a un perito médico especialista en daños corporales, es decir, en base a las lesiones físicas y/o psicológicas derivadas del accidente.
Más allá de las consideraciones éticas y morales, ningún conductor debería darse a la fuga. Si el golpe es leve y sin heridos, sólo se enfrentaría a una sanción económica y administrativa, pero si hay heridos o fallecidos y además se ha consumido alguna sustancia, la sanción irá por la vía penal y podría llegar hasta los 4 años de cárcel.