Carreteras solares, ¿una solución para el futuro?

Josep Camós

1 de septiembre de 2010

Scott Brusaw es un ingeniero eléctrico con 20 años de carrera a sus espaldas que está en plena campaña para conseguir apoyo a su propuesta de crear una red de carreteras solares en Estados Unidos y para eso ha montado la empresa Solar Roadways. Pero como la tecnología necesaria para lograrlo anda en pañales, de momento tiene que conformarse con dar los difíciles primeros pasos de lo que podría ser una solución de futuro a la necesidad de obtener energía eléctrica revirtiendo parte de ella en la señalización de la vía.

La idea pasa por sustituir el asfalto tradicional por unos paneles solares especiales que resisten la carga del tráfico, llevan instalada una red de captación de luz y también una serie de leds que permiten iluminar determinados puntos de la vía para señalizarla de forma variable. No es un reto sencillo, pero no me negaréis que tiene un cierto halo de interés, ni que sea por la curiosidad de ver cómo un elemento cotidiano como la carretera se podría convertir en una fuente de energía o, para ser más exactos, de transformación de la energía que nos cae del cielo.

Leds instalados en el panel solar

Los paneles diseñados por Brusaw están compuestos por varias capas: la superior, que es translúcida, es la zona de contacto de los vehículos y está adaptada para soportar el tráfico y las inclemencias meteorológicas. La siguiente capa capta la luz del sol y transforma esa energía en electricidad, además de albergar los puntos de iluminación necesarios para crear la señalización y un circuito de calefacción que calienta el «asfalto», de manera que que se pueda retrasar la aparición de hielo o nieve sobre la calzada. Finalmente, la tercera capa, la base, corresponde al complejo cableado que llvea de la carretera a las centrales y viceversa la energía eléctrica y también datos, desde los relacionados con el tráfico hasta comunicación de todo tipo, televisión e internet incluidas.

Brusaw afirma que cada panel, de unos 13m2, puede producir unos 7,6kW/h al día. Eso significa según sus cálculos que un tramo de autopista de cuatro carriles de una milla de longitud podría abastecer de electricidad a 500 hogares, lo que implica que si se pudieran reemplazar todas las carreteras de Estados Unidos, se produciría en la red viaria más electricidad de la que necesitan.

Cada panel tiene un coste de unos 8.000 euros y una vida útil de 21 años aproximadamente, lo que puede verse como un enorme problema para la adopción de este tipo de instalaciones… o todo lo contrario si tenemos en cuenta que la transformación de energía solar en electricidad puede llegar a compensar con creces esta inversión. Después de todo, el asfalto y la pintura que se emplea para marcar las carreteras tampoco es que sean baratos precisamente, y son elementos que al fin y al cabo derivan del petróleo.

Montaje de un panel solar

Precisamente el motor de esta propuesta está en la voluntad de reducir la dependencia del petróleo y cambiar esa fuente de energía por algo que se presenta como un recurso más limpio. Si esto es viable o no, el tiempo y los intereses creados alrededor de los combustibles fósiles dirán.

Para todo lo demás, una espectacular sección de preguntas más habituales creada por Scott Brusaw da respuesta a las dudas que se nos puedan plantear sobre este sistema, desde la limpieza o la rotura de los paneles hasta el papel de este tipo de infraestructuras allá donde nunca da el sol, como por ejemplo en los túneles o en las regiones más umbrías. Básicamente, en estos casos el panel actúa más como elemento de iluminación que como elemento de captación de la luz.

Además, la posibilidad de emplear esta gigantesca red de transformación de la energía en un permanente punto de recarga para los coches eléctricos le da un plus de viabilidad al proyecto de una movilidad más sostenible, eliminando el eterno inconveniente de los vehículos recargables, que es encontrar un enchufe en medio de la nada. Con una instalación continua que discurre por el mismo trazado que sigue el vehículo, se acabó ese problema.

¿Podría ser este tipo de infraestructuras una solución a largo, larguísimo plazo?

Vía | Blog de pepecar
Fuente | Solar Roadways