Hay dos cosas que me encantan de las motos: la sensación de libertad que se experimenta a los mandos de ella, pues todos los sentidos funcionan al máximo, y tanto el tacto como el olfato tienen especial importancia. Dentro de un vehículo de cuatro ruedas es complicado experimentar los olores que existen en una carretera de montaña, o por ejemplo, el cambio de temperatura en invierno entre el exterior y el interior de un túnel.
Pero al igual que te da esta libertad, también se convierte en un peligro el querer disfrutar de esta afición uno solo. En caso de caída, sobre todo en una salida de vía, puede llegar a ser muy difícil que alguien nos vea o se percate de nuestra presencia. Y los primeros minutos son los más importantes en una intervención.
[Nota: Este post ha sido actualizado para un mejor tratamiento de la información ofrecida]
Para ello acaba de salir al mercado un dispositivo que detecta la caída de la moto y pone automáticamente en conocimiento de los servicios de asistencia la localización exacta del vehículo accidentado. Se llama Protect Sat Smart Bike y dispone de un receptor GPS que se percata de cuando la moto sufre una caída y una deceleración brusca. Si a los siete segundos esta no se pone en pie, la señal es recibida en una central que intenta ponerse en contacto con el dueño de la motocicleta. Si pasados tres minutos, la moto permanece tumbada y el dueño no responde, se avisa al 112 que inmediatamente saldrá para ayudar al conductor accidentado.
El innovador dispositivo, que comercializa la firma European Datacomm, sirve a su vez como medida antirrobo, pues tanto si el conductor avisa de la sustracción o el vehículo sufre un movimiento no autorizado, se puede seguir su ubicación en tiempo real, avisando a las autoridades pertinentes. Su precio, IVA incluido, es de 464 euros, más 243 euros si se contrata el servicio anual de asistencia por robo.
Por su parte, MAPFRE empezará a comercializar a principio del 1 de Julio un seguro denominado “eBike10” para motocicletas de 125cc en adelante vinculado a la instalación de un dispositivo electrónico de seguridad que facilita la misma aseguradora. Para todos aquellos vehículos que ya estén asegurados, también existirá la posibilidad de instalarlo.
El coste del dispositivo de MAPFRE, incluida la instalación y el mantenimiento, es de 150 euros el primer año, lo que supone un 68 por ciento menos que lo que cuesta el aparato de European Datacomm. En los años sucesivos, el coste es de 120 euros, pero en función de los hábitos de conducción los motoristas que cumplan determinados requisitos recibirán tarjetas de combustible por valor equivalente al 25 por ciento, 50 por ciento o por el coste total de la renovación del dispositivo, siempre que se renueve la póliza.
Más información | European Datacomm España, MAPFRE