El pasado mes de abril, la ciudad de Murcia recibió el Premio Europeo de Movilidad Urbana Sostenible de 2015. Lo anunció la Comisión Europea en una ceremonia celebrada en Bruselas.
El premio reconoce las actividades de promoción llevadas a cabo en Semana Europea de la Movilidad, que tuvo lugar del 16 al 22 de septiembre de 2015. Murcia se centró en promocionar la movilidad multimodal. En ese sentido, está llevando a cabo una serie de medidas a largo plazo para garantizar la movilidad de todos, sean peatones, ciclistas o automóviles.
Coexistencia de peatones, ciclistas y automóviles en Murcia
Mientras algunas ciudades optan por sencillamente prohibir el coche en el centro, otras urbes apuestan por una convivencia de todos los usuarios de la vía, adaptándose a las necesidades y hábitos de sus ciudadanos. Murcia, con 440.000 habitantes, es de la ciudades que apuesta por la convivencia, de ahí su fomento de la intermodalidad.
Si bien el premio recoge la labor de promoción, eso no debe esconder el hecho que Murcia recibió el premio por su labor a largo plazo y que se recoge en las más de 300 páginas del «Plan de Movilidad Urbana Sostenible del Municipio de Murcia».
Casi el 37 % de los residentes de Murcia realizan sus movimientos a pie. Así, entre los principales problemas para la movilidad peatonal hay que destacar la elevada ilegalidad en los estacionamientos de vehículos que produce interrupciones en la correcta circulación de los peatones, si bien, habría que destacar también que hay una baja tasa de mortalidad por atropellos (0,48 en Murcia mientras que la media Española asciende a 1,57). Murcia trabaja ahora en mejorar la regulación de los estacionamientos: parkings, mejor señalización, ampliación de aceras, etc.
Por otra parte, el uso de la bicicleta como medio de transporte ha crecido un 3 % en 2013 con respecto a 2010. Murcia se ha fijado como objetivo que el 10 % de los desplazamientos urbanos se hagan en bicicleta, para ello trabaja en la mejora de sus infraestructuras para bicis (rediseño de los cruces y rotondas, creación de nuevos carriles bics, parkings cerrados para bicicletas, etc). Además, el plan recoge que la implantación de las varias vías ciclables irán en paralelo a la creación de las zonas de tráfico restringido, sobre todo para los ejes ciclables que discurren en las grandes vías de acceso al centro de Murcia Ciudad. Ahí, el transporte público cobra de nuevo importancia y llegamos a la intermodalidad.
La intermodalidad, clave para una circulación sostenible
La intermodalidad bicicleta-transporte público es una muy buena solución para mejorar la sostenibilidad del sistema de transporte de una ciudad, teniendo en cuenta que la bicicleta es uno de los modos más ecológicos, económicos y saludables. La interconexión entre la red de itinerarios ciclables y la red de transporte público colectivo, permite aumentar su autonomía ya que favorece la combinación de los viajes de larga distancia (en autobús o tranvía) con los de corta distancia (en bicicleta), facilitando así la realización de desplazamientos puerta a puerta. Para ello, es precisa la instalación de aparcamientos de bicicletas en las paradas y estaciones de transporte público (tren, tranvía y autobús), así como el permiso y equipamiento necesario para llevar la bicicleta en los vehículos de transporte colectivo.
Así, las principales medidas puestas en marcha se caracterizan por un planteamiento innovador de la electromovilidad intermodal (scooters y bicicletas eléctricos), así como por soluciones prácticas, tales como cursos de conducción eficiente, soportes para colocar bicicletas en los autobuses, admisión de bicicletas plegadas en los mismos, admisión de bicicletas en los carriles bus, ampliación de la zona de estacionamiento de pago.
En definitiva, Murcia está reinventado su movilidad, una movilidad donde hay sitio y soluciones para todos, sin ninguna imposición.
Fuentes | EFE, Ayuntamiento de Murcia (plan de movilidad)