Diez motivos para no exceder los límites de velocidad, tampoco en verano

Redacción Circula Seguro

21 de junio de 2023

Comienza el verano y aumenta el número de desplazamientos de largo recorrido que se llevan a cabo para disfrutar del buen tiempo y de las vacaciones. Sin embargo, las ganas por llegar al lugar de destino no pueden ser  motivo para ir más rápido de lo recomendado. Los límites de velocidad establecidos en las carreteras están para que se circule con seguridad y sin poner en riesgo a ningún usuario. Si todavía no estás convencido de los motivos para cumplir siempre con los límites, especialmente en verano, no te pierdas estas diez razones que se enumeran a continuación.

1-No por correr más llegarás antes. Y es que no todo depende de la velocidad. Hay circunstancias que se escapan a tu control como son posibles atascos, vías cortadas, condiciones climatológicas, que tengas que hacer más paradas de las que un principio habías programado… Como verás, no merece la pena ponerte en riesgo, aunque puedas adelantar algunos minutos.

2-A mayor velocidad, mayor distancia de detención. Por un lado, tenemos la distancia de reacción, es decir, la distancia recorrida hasta que el conductor reacciona y, por otro lado, la distancia de frenado, que es la distancia hasta que el vehículo se detiene. Todo suma a la hora de determinar la distancia de detención total. En definitiva, a mayor velocidad más kilómetros recorres antes de poder detener el vehículo.

3-Cualquier siniestro en el que te veas implicado tendrá consecuencias mucho más graves si llevas una velocidad excesiva. ¿Sabías que un aumento de 1 km/h en la velocidad media de un vehículo provoca un incremento de entre el 4% y 5% en las colisiones mortales? La Organización Mundial de la Salud ofrece este dato y, además, señala que los usuarios tienen más probabilidades de sufrir lesiones cuando circulan a velocidades elevadas, tanto en las colisiones frontales como en las de impacto lateral. En definitiva, se puede decir que a mayor velocidad, mayor gravedad de las lesiones.

Una colisión a 50 km/h equivale a caer desde un tercer piso, según la Dirección General de Tráfico. Si la colisión se produce a 120 km/h, se asemeja a caer desde el piso 14 y desde el 36 si la velocidad que se lleva es de 180 km/h. Las lesiones son letales.

4-Peores son las consecuencias si en el siniestro hay involucrados usuarios vulnerables como peatones, ciclistas y motociclistas. La OMS apunta que un peatón adulto tiene un riesgo de muerte inferior al 20% si es atropellado por un automóvil que se desplaza a menos de 50 km/h; pero si la velocidad es de 80 km/h, el riesgo de perder la vida sube a casi el 60%. Se trata de usuarios vulnerables que no cuentan con un chasis que les proteja de un atropello o colisión.

5-Se produce el efecto túnel, es decir, la velocidad afecta al proceso de percepción visual y, por lo tanto, se percibe peor cualquier peligro que pueda haber en los laterales de la carretera. Esto es especialmente peligroso cuando hay intersecciones. El ojo es incapaz de detectar las imágenes laterales, debido precisamente a esta velocidad excesiva.

6-Se reduce la capacidad de asimilar lo que ocurre a tu alrededor y, por lo tanto, disminuye tu anticipación y favorece la aparición de otros factores especialmente peligrosos al volante como son la fatiga, la agresividad o las distracciones.

7-La velocidad hace más complicada la ejecución de determinadas maniobras como, por ejemplo, la toma de curvas. También cuesta más rectificar posibles errores durante la conducción como, por ejemplo, no haber tomado la salida de vía correcta o circular por el carril equivocado.

8-La velocidad afecta a la seguridad del vehículo. Si circulas a una velocidad excesiva , especialmente en curvas, hay una mayor inestabilidad y se puede incluso perder la trayectoria o sufrir un derrape. Según Tráfico, el riesgo de sufrir una salida de la vía en estos casos puede llegar a multiplicarse por tres.

9-El resto de usuarios no pueden percibir correctamente tu velocidad y, por lo tanto, tienen dificultades para calcular adecuadamente tu distancia. Por lo tanto, también hay un mayor riesgo de tener un choque con otros vehículos.

10-Incumplir la ley relativa a la velocidad máxima conlleva una multa y la retirada de puntos, que variarán en función de cuánto se exceda esta velocidad.

Diez motivos más que suficientes para que durante este verano respetes siempre los límites máximos de velocidad y no sólo eso, sino que la adaptes a las circunstancias concretas de la vía. Disfruta del trayecto, pero con la garantía de circular a una velocidad adecuada.