Día a día en cualquier autopista pueden verse a camioneros circulando muy próximos uno a otro, o a turismos sospechosamente pegados a autobuses, camiones o turismos, ¿por qué? Están «cogiendo el rebufo», o lo que es lo mismo, beneficiándose de una baja resistencia aerodinámica, por interés o desidia de conducción. Cuando circulamos, el coche tiene que vencer sus *rozamientos internos, contra el suelo y contra el aire*. En toda la atmósfera terrestre, estamos rodeados de aire, *que a fin de cuentas, tiene masa*.
Un automóvil está constantemente desplazando aire que existe en su frontal y choca contra su paragolpes, capó, retrovisores, luna delantera, techo… Cuanta más superficie frontal, peor Cx o mayor velocidad, *más potencia es necesaria*. Un utilitario de 180 CV es una auténtica bala, pero un todoterreno, suponiendo que pesasen lo mismo, no podría alcanzar la misma velocidad con 180 CV, y de hecho, sus prestaciones serían normales.
Los todoterrenos no sólo gastan más por su peso o sistema 4×4 (más rozamientos), *también por su mala aerodinámica*. Por un lado tienen carrocerías grandes, por otro, su elevación de carrocería respecto al suelo ofrece más resistencia al avance, *por eso los coches de competición tienen la mínima altura posible*, de ahí que existan modelos con la suspensión rebajada para coches de calle de corte deportivo o deportivos a secas.
Pues bien, cuando se circula detrás de un vehículo de nuestro tamaño o superior, el precedente está haciendo el esfuerzo de apartar el aire y echarlo a sus lados. El flujo de aire que golpea al segundo vehículo es menor cuanto más cerca viaje del primero, y eso *hace que la resistencia aerodinámica sea mucho menor*. La primera consecuencia de esto es que el consumo del motor disminuye, y cuanta mayor sea la velocidad, más baja.
Haré una clasificación de tres formas de «coger el rebufo»:
* Rebufo _económico_: Como el petróleo está caro, hay que ahorrar. Una forma muy eficiente de bajar el consumo en carretera es colocarse detrás de un camión o autobús, todoterreno o SUV alto y colocarse muy cerca de él para que nos ahorre el esfuerzo de apartar el aire. La pega del método es que nos vemos obligados a ir a la misma velocidad que el _vehículo subvencionador_, pero así también se ahorra. *Otra pega: es peligrosísimo*.
* Rebufo «la carretera es mía»: Hay conductores que no saben o no quieren saber que las vías públicas *son para que las usemos todos*, y que tenemos derechos y deberes. Cuando uno de estos sujetos se encuentra el carril izquierdo de la autopista ocupado, con o sin ráfagas de luces largas, se ponen a 1-2 metros de tu paragolpes esperando a que te apartes, por que *debes* dejarles pasar, la carretera es suya a fin de cuentas. Mientras no lo hagas, estarás haciéndole ahorrar combustible, así compensa el que ha ido gastando por ir más deprisa que tú.
* Rebufo por ignorancia: Este es el que practican todos los conductores que usan la versión económica o amenazante, ya que *no saben lo que puede ocurrir mientras se circula TAN próximo a otro vehículo*, y tiene mucho que ver con el tiempo de reacción.
Un adulto de 20-30 años, sin problemas psicológicos ni físicos, despierto, en las mejores condiciones, desde que su sistema nervioso percibe algo hasta que toma una acción motora con sus músculos, *no baja de 3/4 de segundo o 0,75 segundos*. Ese es el tiempo de reacción. Dicho tiempo puede alargarse en función del estado anímico, reflejos, estado de salud, edad, *alcohol*, *drogas*… Durante ese lapso de tiempo, hablando en plata, *el coche conduce sólo*.
Veámoslo con un ejemplo. Imagínate que circulas detrás de esta furgoneta a 100 Km/h, y transporta cajas. Tu estado físico y psíquico es perfecto. De repente, una de las cajas cae a la carretera al abrirse la puerta accidentalmente. Tus ojos perciben el movimiento, pasan la información al cerebro y este toma la decisión de mover el pie derecho para tocar el freno, así que se manda la orden por la espina dorsal hasta el músculo en cuestión y se pisa el freno. *Esto ha durado 0,75 segundos*, durante los cuales, *tu coche ha recorrido 20 metros sin ningún control*.
Si viajas «a rebufo» de la _furgo_ a menos de 20 metros, la caja colisionaría contra el parabrisas sin que puedas hacer nada. ¿Por qué hay que guardar una distancia de seguridad? *Pues por el tiempo de reacción*, hay que dejar espacio suficiente no sólo para reaccionar, sino *para que nuestro coche pueda frenar* sin colisionar con el vehículo precedente. Existen muchas razones por las cuales un vehículo que va delante de nosotros puede frenar, justificadas o no, *pero existen*.
distancia de detención = distancia de reacción + distancia de frenado
*Cuanta mayor sea la velocidad, mayor debe ser la distancia de seguridad*. Piensa que a 130 Km/h, durante el tiempo de reacción el coche recorre sin control 27,8 metros, a 150 Km/h 31,25 metros y a 200 Km/h 41,6 metros. Cuando veo dos vehículos «pegados» en autopista, lo paso mal, sobre todo si soy el que va delante. Una mínima pulsación del freno y colisionamos, por que no le dará tiempo a reaccionar al que va detrás.
A todas luces, no merece la pena un ahorro de unos pocos litros/100 Km si por ello *nos podemos matar* directamente. Coger rebufo en los juegos de conducción es divertido y nos da puntos o mayor aceleración, pero en un vehículo real, *las consecuencias de no guardar la distancia de seguridad no son ninguna broma*. Sólo hay un momento en el que no es prudente guardar distancia de seguridad, cuando se va a hacer un adelantamiento, maniobra que debe durar *por definición* el mínimo tiempo posible, es mejor ir un poco pegado, conociendo lo que tiene el conductor precedente delante, por supuesto.
Además, hay otro motivo interesante para mantener la distancia de seguridad, *que es sancionable* y que se nos puede parar o multar por eso, ya que estamos poniendo en peligro a otros conductores, además de nosotros mismos. Si tenemos la mala suerte de que nuestra distancia de seguridad la ocupa el coche de un espabilado, seamos racionales y separémonos. Si aceleramos «para que no se cuele», estamos creando una situacion peligrosa.