Hace dos años, la DGT reconocía que el mantenimiento del poste SOS era mínimo y por ello, a pesar del avance de la tecnología móvil, decidían mantenerlos en nuestras carreteras. Ayer, Pere Navarro anunció que en los próximos tres años se retirarán buena parte de los más de 5400 poste SOS que se encuentran nuestras carreteras. La razón de tal decisión es que de esta manera se ahorrarán los más de dos millones de euros en gastos de mantenimiento.
Quedarán excluidas de tal decisión aquellas zonas en las que la cobertura de la telefonía móvil sea baja así como los túneles. El propio Navarro reconocía la gran labor que ha realizado estos postes SOS en sus más de 20 años de servicio, aunque no huye de la realidad y esa no es otra que la de un uso cada vez más residual.
En la última década, el uso de los postes SOS ha pasado de las más de 50 mil llamadas a poco más de 10 mil. En 2007, las 17.000 llamadas que recibieron los diferentes centros de gestión de tráfico de la DGT con origen en estos postes constrastan mucho con las más de dos millones de llamadas que se recibió en el teléfono gratuito 112.
Y eso sin tener en cuenta que para incidencias de tipo mecánico ya no se llama al teléfono de emergencias sino que lo hacemos a nuestra compañía de seguros o a Automovil Club para que vengan a socorrernos.
La ausencia de los postes SOS hará un poco más importante tener un teléfono móvil a mano por si tenemos algún problema en la carretera. En esa situación, el móvil se convierte en un aliado. Ya no sólo por la llamada sino porque los servicios de emergencia pueden ser capaces de ubicar nuestra posición mediante los sistemas de localización de llamadas.
Vía | El Mundo Motor
En Circula Seguro | El poste SOS. Ese gran desconocido