Conducir y utilizar el teléfono móvil a la vez está prohibido. Además de recogerlo así la normativa, hay que tener en cuenta las terribles consecuencias que puede tener esta acción. A pesar de todo, se sigue haciendo uso del teléfono móvil mientras se conduce. Así lo ha dado a conocer el Barómetro realizado por Fundación VINCI Autoroutes que ha preguntado a más de 12 mil conductores de 11 países europeos acerca de sus conductas al volante. No sólo utilizan el móvil para hacer llamadas o mandar mensajes de textos, el trabajo pone sobre la mesa un dato especialmente llamativo y peligroso: el 23% de los menores de 35 años visualiza vídeos mientras conduce, una conducta de alto riesgo en la que el tiempo que circulan distraídos se multiplica irremediablemente.
Cuando se utiliza el teléfono móvil al volante se reducen de manera peligrosa las capacidades para percibir lo que ocurre alrededor y reaccionar a tiempo ante imprevistos. Usar el móvil conlleva una distracción visual (los ojos sólo miran la pantalla), una distracción cognitiva (se está pendiente de la conversación) y una distracción manual (se sujeta el móvil o se escriben mensajes de texto). Todo ello supone que las posibilidades de sufrir un siniestro de tráfico se multipliquen por 23, según AAA Foundation for Traffic Safety.
De hecho, el riesgo de conducir con el teléfono móvil se equipara al de conducir tras haber ingerido alcohol. Incluso una conversación por el manos libres supone una gran distracción en sí misma: hablar por el móvil multiplica por 4 el riesgo de colisión, y duplica la probabilidad de cometer errores graves en la conducción, según el estudio ‘Teléfono móvil, cansancio, somnolencia y distracciones al volante’, realizado por Fundación MAPFRE. Una simple llamada relajada supone bajar la guardia y se cometen más del doble de errores que cuando se conduce sin usar el teléfono. A pesar de todo, más de 1 de cada 2 conductores (55%) realiza este tipo de llamadas al volante, el 67% no considera que esta práctica sea peligrosa, y el 15% ya ha tenido, o ha estado a punto de tener, un siniestro como consecuencia de su uso, según el mencionado Barómetro francés. Además, ya no sólo se llama por teléfono o se escriben mensajes mientras se conduce, el 23% de los menores de 35 años ve películas o vídeos mientras conduce. Una conducta tan peligrosa como inexplicables, que pone en riesgo su vida y la del resto de usuarios de la vía.
Cuando vayas a conducir, olvídate en todo el momento el teléfono móvil. De hecho, basta tenerlo en la mano para poder ser sancionado. Evita las llamadas de teléfono y no lo manipules al volante, aunque estés parado. Al volante es imprescindible tener todos los sentidos puestos en la carretera.