No hay nada como planear una salida por el campo. Hace un día precioso, preparamos todos los bártulos, nos llevamos un tentempié, quedamos con nuestros compañeros de ruta y partimos contentos hacia lo que puede ser un gran día. Pero en medio de la ruta y concentrados en disfrutar al máximo, nos encontramos con un vado, y nos metemos tranquilamente: error.
Cuando salimos al campo (siempre por rutas donde esté permitido, y siempre llevando lo mínimo imprescindible para hacer la ruta con seguridad) no podemos dejar nada al azar o a la improvisación. Los aficionados al 4×4 más expertos lo saben, y por eso es buena idea que, si te inicias en esto, vayas bien acompañado, o aconsejado. Jamás has de meterte en un río sin saber si puedes vadearlo con tu coche: puedes quedarte sin él.
Medir la profundidad del agua antes, es fundamental
Lo mejor que podemos hacer, si no conocemos perfectamente el vado en cuestión, es medir la profundidad del agua antes de intentar cualquier cosa. Si no lo hacemos iremos derechos al desastre, en concreto nos puede pasar lo que a estos aguerridos aficionados rusos que se meten «en camisas de once varas»:
Adiós, coche, adiós. En este vídeo se pueden ver varias cosas prohibidas en una salida offroad. Una de ellas es evidente: si no sabes la profundidad del río, el coche se puede hundir sin remedio. Otra es que nunca, nunca, se debe sujetar un coche que se hunde por la defensa. ¿En qué pensaba? Otra es, posiblemente, el nivel de alcohol en sangre de los protagonistas (pero esto no se aprecia bien).
Lo más inteligente a la hora de vadear un río es evitarlo siempre que puedas. Es muy vistoso, sí, pero con pocas cosas que se tuerzan peudes tener un percance serio. Para empezar, si por cualquier cosa, la velocidad del agua aumenta, podemos ser arrastrados por la corriente mucho más fácilmente de lo que podamos siquiera imaginar.
Pero suponiendo que tenemos controlada la velocidad del agua, y que no nos va a pasar nada en ese sentido, tenemos varios parámetros que revisar:
- La profundidad del vadeo. Si es mayor que la profundidad máxima de vadeo para nuestro modelo en particular, que no se nos ocurra pasar.
- Deberíamos comprobar a pie que el vado es seguro, saber exactamente qué profundidad tiene, y sobre todo si en el camino nos vamos a encontrar con algún obstáculo inesperado.
- Meter el coche en el agua nos debería erizar el vello, sin duda. Si por cualquier cosa el agua entra en el motor nos podemos despedir de él, así que si hemos de vadear, será a la mínima velocidad posible, siempre que el resto de condiciones sean positivas.
- En el caso de los todocaminos y los SUV, una vez más hay que recomendar que se evite el vadeo. Como me dijo una vez alguien, ¿quién va a querer meter esa tapicería en el agua? Si por cualquier cosa, el agua entra en el habitáculo, la broma nos va a salir carísima.
El agua no es el medio indicado para un coche que no esté diseñado específicamente para este tipo de vadeos. Incluso si lo está, hay que extremar las precauciones, hay que ir acompañado y disponer de útiles y herramientas adecuadas para efectuar un rescate, y nunca precipitarse. Hay que tener mucho respeto por los ríos, y ser sumamente prudentes. Como dijimos, lo mejos es evitar el vadeo, pero si lo vamos a hacer, hay que hacerlo con todas las de la ley.
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