Para muchos, llega el momento de iniciar su viaje de regreso de vacaciones. Un viaje de retorno que no todo el mundo afronta con la misma energía y entusiasmo pero que, sin embargo, debe hacerse siempre con la máxima precaución y responsabilidad. En ocasiones se trata de viajes largos que se hacen con altas temperaturas y con equipaje extra. Todo ello lleva a que muchas veces bajemos la guardia y cometamos determinados errores que pueden resultar especialmente peligrosos. Detallamos algunos de los más vistos:
- Pies en la guantera. Seguro que has visto alguna vez a un copiloto con los pies puestos en la guantera. Se trata de una postura muy peligrosa en caso de siniestro vial. Por un lado, tenemos el conocido efecto submarino. El cuerpo se desplaza y el cinturón de seguridad no puede retener adecuadamente y, por otro lado, hay que tener en cuenta las lesiones tan graves que pueden ocurrir en caso de choque frontal. Este es el caso de una joven de Gales que viajaba con esta inapropiada postura. Tras sufrir un siniestro de tráfico se rompía el fémur y una cadera. La otra se dislocó. Hay que tener en cuenta que el airbag se despliega empujando las rodillas contra el cuerpo.
- Uso del móvil mientras conduces. Conducir y utilizar el teléfono móvil está totalmente prohibido. Sin embargo, todavía son muchos los conductores que aprovechan esa parada en un semáforo para escribir un WhatsApp o mandar un audio por el móvil. Un dato especialmente peligroso es que el aporta el Barómetro realizado por Fundación VINCI Autoroutes que ha preguntado a más de 12 mil conductores de 11 países europeos acerca de sus conductas al volante. Aunque sea difícil de creer, no sólo utilizan el móvil para hacer llamadas o mandar mensajes de textos, el trabajo revela que el 23% de los menores de 35 años visualiza vídeos mientras conduce.
- Cascos o auriculares puestos durante la conducción. El coche no tiene manos libres y el conductor opta por utilizar los auriculares. Es un comportamiento muy peligroso ya que no puedes escuchar bien aquello que ocurre a tu alrededor. No hay que olvidar que el oído es un sentido fundamental al volante.
- Animales sueltos dentro del vehículo. ¿Has decidido que tu perro va más tranquilo si no va sujeto con un arnés? ¿Lo llevas entre tus pies o en tu regazo? Se trata de un comportamiento que conlleva gran peligro, ya no sólo para todos los pasajeros del vehículo (el animal puede salir proyectado contra todos ellos) sino también para la seguridad de tu mascota. Debe ir siempre correctamente sujeto utilizando un arnés o un transportín. Haz paradas con frecuencia para que pueda salir a pasear y estirar las patas pero no le dejes suelto dentro del vehículo. Por su seguridad y la de todos.
- -Equipaje hasta arriba. ¿Llevas el maletero cargado hasta arriba? Recuerda que el equipaje debe ir correctamente sujeto y que llevar mucho peso a,fecta a la estabilidad del vehículo. Utiliza soluciones de transporte si es necesario pero recuerda que debe estar separada de la zona de pasajeros.
- Equipaje en los asientos e incluso tapando el parabrisas trasero. No entra en el maletero y has decidido que esa pequeña maleta puede ir en el asiento de atrás. Esto es arriesgado ya que, al igual que ocurre con las mascotas, pueden salir proyectadas ante el más mínimo frenazo. También es habitual que este equipaje tape incluso el parabrisas trasero. Gracias a los retrovisores laterales se puede ver qué ocurre alrededor pero, lo más recomendable, es tener también esta zona despejada para que el conductor pueda ver qué ocurre atrás con el espejo central.
- Correr en exceso. Es un comportamiento que, lamentablemente, se produce con mucha frecuencia. A mayor velocidad, peores consecuencias en caso de siniestro de tráfico. Además, se recorren más kilómetros hasta que el vehículo se detiene por completo. Por lo tanto, hay que tener en cuenta que los límites de velocidad se han establecido en cada tramo de vía por un motivo: garantizar la seguridad.
- No llevar puesto el cinturón de seguridad o que los niños menores de 1,35 metros vayan sin sistema de retención infantil. El viaje se te hace muy largo y consideras que vas más cómodo sin ese cinturón que te cruza. Sin embargo, es el sistema de seguridad que más puede protegerte en caso de siniestro de tráfico. Lo mismo ocurre con los niños, que deben viajar con su sistema de retención infantil homologado y correspondiente a su altura y peso para una óptima seguridad. Sabemos que puede no ser lo más cómodo del mundo, pero la seguridad debe primar en todos los desplazamientos.
Se han enumerado algunos de los comportamientos de riesgo que más habitualmente se ven las carreteras. Sin embargo, hay otros muchos que reducen la seguridad de todos los usuarios de la vía, como ir marcha atrás porque te has saltado una salida en plena autopista o autovía, hacer adelantamientos peligrosos o realizar cambios de sentido en zonas en las que está totalmente prohibido.
La responsabilidad individual de cada uno debe primar en todos los viajes. Tu seguridad y la de los demás dependen de ello.