Los atascos propios de los núcleos urbanos dan lugar a que los motoristas opten por “zigzaguear” y adelantar puestos en la cola. Pero no en todas partes está permitido, depende del país donde te encuentres. Por ejemplo, en España se puede hacer siempre que sea en ciudad y los vehículos estén totalmente parados, como, por ejemplo, en un atasco o en un semáforo. No se puede en vías interurbanas o si el resto de vehículos están en movimiento. Por el contrario, en Portugal está prohibido en todos los casos. Más allá de si la normativa lo recoge o no y aunque esté permitido, hay que tener en cuenta que esta maniobra puede resultar peligrosa si no se realiza correctamente.
Y es que no hay que olvidar que los motoristas son usuarios vulnerables y, por lo tanto, cualquier golpe, como puede ser una apertura de puerta inesperada o un giro de última hora de un coche, puede provocar que irremediablemente el motorista caiga al suelo con lo que esto puede suponer. Los motoristas no cuentan con una carrocería que les proteja y, por lo tanto, cualquier impacto afecta directamente a la moto y al cuerpo. El riesgo de hacer zigzag es todavía mayor cuando se hace entre autobuses y camiones. ¿El motivo? Cuanto mayor es el vehículo, más puntos ciegos o más ángulos muertos tiene.
Si eres motorista y deseas adelantar a un vehículo, lo más recomendable es hacerlo siguiendo las principales normas de seguridad. Aquí damos todas las pautas para realizar un adelantamiento perfecto. Se debe informar de la intención y asegurarse de que se puede invadir el carril izquierdo para adelantar. Se recomienda circular por el centro del carril para no correr riesgos y dejar una distancia lateral mínima de 1,5 metros durante el adelantamiento.
Hay que evitar rozar al resto de vehículos y tener en cuenta los retrovisores. Debes intentar prever, en la medida de lo posible, los movimientos del resto de conductores, como pueden ser cambios de carril, giros o estacionamientos.
Por otro lado, hay que tener en cuenta que muchos conductores pueden no verte. La agilidad que ofrece una moto te permite cambiar de un carril a otro con rapidez. Sin embargo, cuando los coches están parados e inician el movimiento, no todos observan lo que ocurre a su alrededor. Además, muchos conductores aprovechan estas retenciones para observar el teléfono móvil o manipular el GPS, algo que está totalmente prohibido y que, sin embargo, muchos siguen haciendo.
Por último, en lo que respecta al arcén, es una línea que no se debe traspasar salvo que haya una avería, un siniestro de tráfico o se circule a una velocidad anormalmente reducida por una emergencia.
Como motorista, ten en cuenta todas las circunstancias y sé consciente de tu fragilidad. Evita toda acción que te pueda poner en riesgo.