Aire acondicionado y climatizador: encuentra las diferencias

Redacción Circula Seguro

27 de diciembre de 2021

La función de los sistemas de aire acondicionado y de los sistemas de climatización es muy parecida. Podría decirse que son sistemas hermanos, pero no son idénticos. ¿Vas a comprarte un coche y no tienes claro qué sistema de ventilación escoger? Te contamos las diferencias y las principales claves de cada uno de ellos para que sepas elegir con criterio.

Principio de funcionamiento

La gran diferencia entre ambos es que el climatizador dispone de un sensor diseñado para que te puedas olvidar de controlar la velocidad del ventilador y las salidas del aire, que, además, permite alcanzar una temperatura constante, independientemente de la temperatura exterior. El principio de funcionamiento del aire acondicionado y del climatizador es el mismo: se trata de un gas que es comprimido y al que se cambia de estado por absorción de temperatura. De hecho, los componentes principales del sistema son los mismos, pero la regulación y mezcla de aire es diferente.

En el sistema de aire acondicionado somos nosotros los que debemos realizar la regulación de la temperatura, su activación o desactivación, y debemos abrir o cerrar las rejillas de ventilación por donde queramos que salga el aire. Es decir, no se trata de un sistema autónomo. Su ventaja: que su coste es menor que un sistema de climatización, debido a que incorpora menos elementos para su funcionamiento.

Temperatura y humedad

A diferencia del aire acondicionado, el climatizador puede mezclar el aire frío con el aire caliente y conseguir que tanto la temperatura como la humedad en el interior del habitáculo sean las correctas. Todo el sistema de climatización está regulado por una unidad de control que, a través de unos sensores, recibe información de la velocidad del ventilador, de la temperatura interior y exterior y de las distintas zonas del vehículo: de esta manera el conductor solo tendrá que seleccionar la temperatura deseada y podrá despreocuparse de todo lo demás.

Eso sí, el sistema de climatización aumenta el precio del vehículo, ya que ha de llevar una serie de sensores de temperatura exterior e interior del habitáculo, motores eléctricos que mueven las trampillas de entrada de aire en el interior del vehículo por los diferentes difusores, etc.

Una temperatura para cada ocupante

Actualmente, la tendencia es que los sistemas de climatización sean cada vez sofisticados incorporando opciones de climatización bizona, trizona y de cuatro zonas. De esta manera, el sistema puede conseguir una temperatura individualizada prácticamente para cada ocupante del vehículo.

Te recordamos que la temperatura ideal del habitáculo del coche a la hora de conducir es de entre 19 y 22 grados centígrados. Circulando a esa temperatura nos encontraremos mucho más cómodos y, en un viaje largo, nos cansaremos menos y conduciremos de una forma mucho más segura. Recuerda que una temperatura excesiva reduce la capacidad de reacción ante cualquier imprevisto y, además, puede provocar somnolencia e irritabilidad.