Detección activa de ciclistas: ¿solución a la siniestralidad en bicicleta?

Redacción Circula Seguro

16 de abril de 2021

2020 supuso un punto de inflexión en cuanto a cifras de siniestralidad en carreteras. Fue el año en el que, por primera vez desde que se tienen registros de las víctimas, el número de fallecimientos bajó de 1.000 en un año. En total, 870 personas perdieron la vida; una cifra debida, sin duda, al confinamiento por la pandemia del coronavirus.

Sin embargo, este dato que invita al optimismo a pesar de que siguen contándose los fallecimientos por centenares, tiene una parte aún más negativa: las muertes de ciclistas son las que menos descendieron el año pasado. Si, en 2019, 40 perdieron la vida en las carreteras españolas, 36 lo han hecho en 2020, una reducción del 10%. Esto se debe, en parte, al incremento del uso de la bicicleta en la actualidad. Un cambio de costumbre en el modo de desplazarnos que precisa nuevos sistemas de protección.

Cómo funciona ‘Active Cyclist Detection’

Los ciclistas siguen siendo uno de los colectivos más vulnerables en la carretera. Con las cifras en la mano y esta certeza bien presente, la Universidad Isabel I, con el apoyo de Fundación MAPFRE y Fundación Michelin, ha desarrollado el proyecto ‘Active Cyclist Detection, dirigido por Raúl Gómez, profesor del Máster en Prevención de Riesgos Laborales de dicha universidad, a través de su trabajo en INSEGSA Ingeniería Preventiva.

Este nuevo proyecto de investigación y desarrollo pretende reducir la siniestralidad de víctimas de ciclistas en carretera. Se trata de una señalización luminosa que avisa al conductor de la proximidad de una persona en bicicleta. El ciclista, a su vez, confirma este aviso a través de unas balizas LED en el suelo y de señales verticales que se activan a su paso. Para que estos equipos sean eficientes, deben instalarse cada 5 kilómetros. De este modo, pueden cubrir tramos completos de carretera sea cual sea su longitud. En estos términos lo expresa en una entrevista ofrecida por el propio Gómez al periódico El Norte de Castilla.

Este sistema es capaz de discriminar por velocidad a otros vehículos que circulen en ese momento gracias a un lazo inductivo enterrado en el pavimento y unido a un radar. En el momento en que un ciclista pasa por encima del lazo, la señal vertical que contiene el pictograma de aviso se ilumina, así como una secuencia de LED colocados junto al arcén. El ciclista, gracias a ‘Active Cyclist Detection’, se asegura un campo de acción de 50 metros tras la señal, suficiente para que el conductor pueda maniobrar en consecuencia y mantener el metro y medio de distancia que prevendrá de roces u otros encontronazos inesperados.

Pilares y objetivos sobre los que se sostiene el proyecto

Este proyecto se basa en tres pilares fundamentales, según palabras del propio Raúl Gómez: la siniestralidad de ciclistas entre los años 1993 y 2017, su experiencia personal a bordo de una bicicleta y la evolución de su uso como medio de transporte. 

Al tener en cuenta estos elementos, él y su equipo llegaron a la conclusión de que sí era viable poner limitaciones y avisos en carretera, aunque, a priori, pareciera una misión imposible. Era necesario, además de por convicción, crear un sistema que adaptara la carretera a las necesidades reales de los ciclistas, sobre todo en un marco en el que, en 2020, fallecían dos personas en bicicleta cada tres semanas.

También son tres los objetivos que se quieren lograr con la consecución del proyecto: suplir las necesidades actuales del equipamiento existente en carreteras en relación con los ciclistas, llamar la atención de los conductores y mejorar el conjunto que forman vehículo y ciclista. 

El prototipo fue galardonado el pasado mes de noviembre con el Premio Nacional a la Innovación en Seguridad Vial y Movilidad Sostenible en la III Edición de los Premios de la Fundación CNAE, y cuenta con la aprobación de la Federación Extremeña de Ciclismo. En la actualidad, el proyecto se encuentra en la fase de prueba piloto, situado en un tramo elegido a propósito por su alto tránsito de bicicletas y vehículos.

Por qué se producen tantos accidentes con ciclistas

Varios son los factores que inciden en la alta siniestralidad de ciclistas en carretera y que quieren evitarse con este nuevo proyecto. Por lo general, la idea del coche como centro y rey del tránsito debe evolucionar hacia un concepto en el que se tenga conciencia de la carretera como un espacio a compartir entre distintos vehículos. Sobre todo cuando hay una diferencia tan abismal de velocidad, como ocurre entre coches y bicicletas. Esto está relacionado de forma directa con la educación vial. Existen pocas campañas que sitúen en primera plana las responsabilidades de ciclistas y conductores de vehículos como elementos que se acompañan mutuamente.

Estas, unidas al espacio temporal tan conflictivo que comparten bicis y coches (las salidas nocturnas agravadas con alcohol y drogas de los vehículos junto a las sesiones matutinas de ciclismo), son algunas de las principales causas de atropello de ciclistas. Gracias al nuevo proyecto ‘Active Cyclist Detection’, apoyado por la Fundación MAPFRE y Fundación Michelin, se prevé que todo cambie y que las muertes de ciclistas en carretera se conviertan en una simple anécdota.

Por Antonio Bret

En Circula Seguro | Así es Active Cyclist Detection: un nuevo sistema de prevención de atropellos

Imágenes | Martin Magnemyr/Unsplash, Fundación CNAE,